Estado actual de la evaluación psicológica en Argentina
Silvia V Pugliese. Universidad del Aconcagua- Universidad N. de Rosario
Hasta 1985 los psicólogos teníamos prohibida la práctica de la psicoterapia, sin embargo, no estaba en discusión el ejercicio del psicodiagnóstico, aunque estaba condicionado porque debía estar prescripto por el médico psiquiatra. A partir de la sanción de leyes que reconoce el ejercicio autónomo de la profesión, se legaliza la inclusión del psicólogo en el campo de la salud mental.
Desde los inicios de la carrera de grado de Psicología, los programas de las asignaturas que fueron adoptando diversas denominaciones. En general, se incluyeron distintas técnicas desde los inicios de la carrera, gráficos, como El Dibujo de la Figura Humana, Bender, Arbol, PMK, Wartegg, Rorschach, TAT, CAT, Desiderativo, y Rosenzweig. También Dominó, Raven, WAIS, WISC, WIPPSI. Más tarde se incorporó, Dibujo Libre, H.T.P, Dos personas, Pareja, Familia, Persona bajo la lluvia, Relaciones Objetales de Phillipson, Frases a completar de Rotter y Sacks y Z Test.
Dado que el Ministerio de Educación, Ciencia y Tecnología declara la carrera de Psicología como “carrera de interés público” mediante la Resolución Ministerial 136/2004, a partir de un documento elaborado por FePRA y AUAPSI (Asociación de Unidades académicas de Psicología); se requiere que los alumnos participen de prácticas preprofesionales, entre las que se incluyen la aplicación de técnicas psicodiagnósticas.
Si bien, las diferentes carreras de psicología en las universidades argentinas en general ponen el acento en la evaluación y el diagnóstico psicológico, reconocen que la formación de grado es insuficiente para el ejercicio profesional, dado que el título de Licenciado en Psicología lo habilita para las 17 actividades reservadas al título de Licenciado en Psicología o Psicólogo. Por ello, Norma Contini destaca que desde la década de los ‘90 se comenzaron a crear cursos de postgrado de especialización en Psicodiagnóstico y Evaluación Psicológica, tanto en universidades públicas como privadas. (Wechsler, 2014).
El impulso al estudio e investigación de las técnicas de evaluación que dieron instituciones como ADEIP (Asociación Argentina de estudio e Investigación en Psicodiagnóstico) y AIDEP (Asociación Iberoamericana de Evaluación Psicológica), refleja el movimiento generado en el país. Al mismo tiempo se contemplaron los aspectos éticos por lo que desde ADEIP se redactó y aprobó el Código de Ética del psicodiagnosticador (2000), tradujo y adaptó las Pautas Internacionales para el uso de los tests-versión argentina (ITC-ADEIP, 2001) y las Pautas éticas para el psicodiagnóstico forense (2010).
A partir de 2000 se vio un cambio en la expectativa de validación en las técnicas utilizadas, también las revistas científicas empezaron a admitir solamente trabajos con el modelo empirista y el auge de las carreras de investigación, antes casi vedadas a los psicólogos por el escaso número de cargos disponibles para la profesión, fueron cambiando las expectativas en el campo. (Silberstein, comunicación personal, abril de 2022).
También es de destacar la actividad desarrollada por el CIIPME (Centro Interdisciplinario de Investigación en Psicología Matemática y Experimental). Se dictaron cursos sobre psicometría clásica y sobre la nueva psicometría, estadística introductoria, técnicas estadísticas de última generación, administración e interpretación de nuevas técnicas. Se han construido y adaptado numerosas pruebas psicológicas en muy diferentes áreas entre otras, destaca la Dra. Richaud (Minzi, comunicación personal, abril de 2022): Psicología del desarrollo, Psicología Positiva, Psicología Perinatal, Desarrollo Moral, Perdón y Evaluación del lenguaje pragmático.
. En la configuración del área de la Evaluación Psicológica, María M. Casullo, profesora e investigadora de la Universidad de Buenos Aires, y ex Presidenta de AIDEP, desde una mirada integradora, destaca:
“Toda evaluación supone un proceso mediante el cual, a partir de un determinado modelo o teoría -implícito o explícito- se intenta comprender y analizar un fenómeno concreto, real o simbólico, en sus aspectos manifiestos o latentes … mediante la administración de técnicas diversas: entrevistas, observaciones, dibujos, cuestionarios, escalas, narraciones, inventarios…. No existe un modelo único de evaluación psicológica, a pesar de que algunas líneas de trabajo suelen proponer el propio como el legítimo” (Casullo, 2008 pags. 230-231). Y lo reafirma al agregar: “evaluar es un concepto abarcativo que contiene, como una subcategoría al psicodiagnóstico, el que es entendido como una forma de evaluación que se concreta fundamentalmente en el campo clínico, en relación con el proceso salud-enfermedad… Es necesario asegurar siempre la validez teórica y ecológico-cultural de cada una de las técnicas, así como la confiabilidad de los resultados o puntuaciones que se obtienen” (pag. 233).
Y en coincidencia con Casullo, aunque desde otra línea teórica, Echaire hace suyas las palabras de D. Rappaport: “el recurso de las técnicas debe derivar de la necesidad de cada caso, a fin de aplicar los tests que requiera la compresión de cada sujeto” (Echaire,comunicación personal, octubre de 2022).
Obstáculos actuales
A fin de disponer de una mirada actualizada de la Evaluación en Argentina, en 2021 la autora del presente artículo realizó una encuesta online enviada a psicólogos, especialmente psicodiagnosticadores. Esta muestra de conveniencia a la que respondieron 109 psicólogos. El 59,5% de los que respondieron, tienen más de 20 años de práctica profesional. Del total el 50,74% usan tests proyectivos, el 29,25% tests psicométricos y el 20,01 ambos. Y el 55,6% no usa baremos. A quienes usan baremos se les preguntó si optan por baremos locales desactualizados o baremos extranjeros pero actualizados, el 90,6% prefiere los primeros.
De los que respondieron, sólo un grupo de 34 encuestados han adaptado o están adaptando un test y sólo 24 han tipificado o lo están haciendo. Se analizaron los principales obstáculos para llevar adelante la tarea de adaptación y/o tipificación de los tests extranjeros, con los siguientes resultados: a) Problemas económicos; b) Falta de profesionales para la aplicación, análisis y estudios complementarios; c) Problemas para la publicación y d) Negativa para la cesión de derechos “para Argentina” (explicitado con el Bender II y el WAIS IV). En algunos casos no se admite como tesis de doctorado. Estas dificultades se profundizan a la hora de plantearse la construcción de técnicas locales. En los casos en que han podido llevar adelante la adaptación y/o tipificación de un test foráneo, la financiación provino: 65,5% de Universidades, 20,70% de CONICET; 13,8% de Fundaciones; 20,7% mixta y el 24,1% fondos propios. Aquí podemos ver que son numerosas las variables que entran en juego varios procesos, entre ellos, paradigmas de quienes conforman los jurados de concursos, de quienes otorgan los subsidios, así como de las políticas de las publicaciones., favoreciendo unas líneas teóricas en detrimento de otras.
Para concluir, se puede decir que en Argentina el devenir de las técnicas psicológicas estuvo más signado por razones sociopolíticas (nacionales y del mundo), entre las que se incluye las políticas sanitarias, universitarias y las estructuras de poder intrauniversitarias, más que por razones científicas. Aunque no puede desconocerse la inserción en las universidades de representantes de líneas teóricas que descalifican la evaluación psicológica. Asimismo, algunas empresas multinacionales les imponen a sus psicólogos la aplicación a su personal, de técnicas construidas y estandarizadas (“tests enlatados”) en otros países. Y, en los últimos tiempos, se han multiplicado las ventas online de material de test, donde le envían un archivo para que se lo imprima el comprador y también el uso de material fotocopiado. Ambas conductas están totalmente reñidas con el Código de Ética del Psicodiagnosticador y las Pautas internacionales para el uso de los tests- versión argentina.
Retos mirando al futuro
Los psicodiagnosticadores son conscientes de la necesidad de contar con instrumentos creados y/ o adaptados y baremos actualizados para Argentina, pero la encuesta arriba señalada revela los obstáculos para alcanzar estos objetivos. Junto a estos, otros desafíos que resta alcanzar se encuentran: a) la sanción de una ley que regule el uso de los instrumentos de Evaluación Psicológica (venta exclusiva a psicólogos y difusión sólo en medios científicos), pues si bien la autora del presente capítulo se ha ocupado de presentar proyectos de ley no se ha logrado que los legisladores la sancionen y b) la creación de un organismo especializado que se pronuncie sobre los instrumentos autorizados y actualizados. Ante esta la realidad, al menos por el momento, cobra fuerza la antinomia realismo/ética, ética/utopía, en tanto las condiciones reales devienen no-éticas por trabajar con técnicas foráneas, desactualizadas y/o material no original. Y los condicionantes éticos devienen utópicos, dado los obstáculos para crear y mantener actualizadas, técnicas locales y adaptar y actualizar técnicas foráneas.
Referencias
Bernstein, J. (1993). Dos Psicologías. Psicodiagnosticar, 52-85.
Casullo, M. M. (2008). La evaluación psicológica. En A. L. Duarte, Ayer y hoy. 50 años de enseñanza de la Psicología (págs. 230-240). Buenos Aires: EUDEBA.
Passalacqua, A. (1994). “El Psicodiagnóstico de Rorschach. Sistematización y nuevos aportes”. Buenos Aires: Klex.
Siquier de Ocampo, G. A. (1974). Técnicas Proyectivas y el proceso psicodiagnóstico I y II. Buenos Aires: Nueva Visión.
Wechsler, S.M. (2014). Test develoment and use in five Iberian Latin American countries. International Journal of Psychology, 49(4), 233-239. doi:10.1002/ijop.12068
Verthelyi, R. F. (1989). Temas de Evaluación Psicológica. Buenos Aires: Lugar.